El miedo a los animales

Por: ARMANDO TIBURCIO ROBLES El descontón plantado a la quisquillosa élite que dirige y usufructúa los cánones de la cultura mexicana es proverbial. En este caso, a esa franja de luminarias que se regodea con luces artificiales engarzadas en los pasillos exclusivos de la literatura. Para no dejar duda de que en todos lados se cuecen semillas de egocentrismo y de luchitas en las capillas de poder. No todo es calidad literaria. "Antes le dolía no haber realizado sus sueños. Ahora le horrorizaba haber soñado con algo tal vil." Salamería, putañerismo y simulación son armas que también se velan en el mundillo de la cultura, colocando en la cúspide de los sagrados santones a aquellos que mejor las practican. A tal grado llega el nivel de comparación que el protagonista, finalmente, tiene que debatirse entre convivir en ese medio (al que tanto había soñado arribar y al cual sangre y sudor le costaron llegar) o mejor regresar al nebulosos, atascado y violento sótano de la Policía J...