15-O. Unidos por el Cambio Global

Tal como llegó se fue. Nunca más la volví a ver pero dejó su huella. Desde entonces deben haber transcurrido 30 años. Me la prestaron, la leí un par de veces, la retuve un poco y la presté. Cuando la busco no hay ejemplar posible, ni en las librerías de viejo. No recuerdo a quien se la dí. Recuerdo muy bien la cara de molestia y las palabras de reclamo del amigo que me la facilitó porque tampoco la volvió a conseguir. Lo único útil para consuelo es que un solo ejemplar sirvió para lectores múltiples. Espero que haya seguido rolando de mano en mano. 

"El Talón de Hierro" novela que publicó en 1908 el controvertido y contradictorio escritor y activista norteamericano Jack London (John Griffith Chaney, 1876-1916).

Me vino a la memoria hace unos meses cuando los noticieros daban cuenta de la turba enardecida de desposeídos británicos que saquearon, sin mayor cuenta ni aparente causa, los comercios de varios barrios en Londres. La tengo más presente ahora que los molestos manifestantes norteamericanos se han plantado a protestar en el newyorkino corazón financiero de Wall Street

London relata los efectos económicos y sociales devastadores del capitalismo industrial pujante en los inicios del siglo XX y las reacciones callejeras de los desplazados, desocupados y empobrecidos de entonces. El espantado pataleo de la burguesía norteamericana floreciente. Un siglo después estamos viendo la acción colectiva (y ahora globalizada) de los indignados por las marrullerías realizadas por los beneficiarios de un capitalismo financiero, salvaje, que han expropiado, con las peores artes de la especulación y la corrupción, los ahorros y los sueños de una gran parte de la población. Más aun, pusieron en crisis la economía del mundo. Y tan campantes...

Para conocer en detalle los procedimientos que siguieron los especuladores, financieros, banqueros, consultores, aseguradoras, "reguladores" y demás caterva de pillos de cuello blanco para desgraciarle la vida al planeta en 2008, es muy recomendable revisar el excelente trabajo videográfico "Inside Job". Es posible localizarlo libremente en múltiples links de video. Aquí uno de ellos.

Antes y ahora los grupos económicos conservadores empiezan viendo en las rabiosas acciones de los empobrecidos solamente a un grupo de alborotadores, desempleados y ociosos. Terminan con espasmos de espanto frente al peligro y la amenaza para sus privilegios. Exigen destemplados poner en orden a quienes en hartazgo y la furia se la juegan para ganar lo que se pueda porque saben que ya no tienen nada que perder.

En dimensiones verdaderamente mundiales eso es lo que estamos empezando a vivir hoy, 15 de Octubre de 2011. El 15-O. Reacción internacional colectiva, globalizada, de indignación social. "Unidos por el Cambio Global". "World Revolution is coming". "¿Recuerdas cuando te atrevías a soñar lo imposible?"

La red informática múltiple permite tener un conocimiento amplio de lo que sucede en el mundo. En decenas de ciudades del planeta decenas de miles de personas salieron a ocupar la calle. Un esperanzado intento de "revolución pacífica". No tiene demandas comunes. Algunas expresadas de manera ingeniosa. No hay líderes identificables. Muchos agravios manifiestos. Por lo pronto se trata de eso, ocupar los espacios públicos, tomar la calle. 

Las autoridades reaccionan de manera diferente. Toleran o reprimen. Algunas provocan. Pero en ninguno de los casos disuaden. La gente ya está harta. Indignada. El clamor crece. "Somos el 99%". Quién sabe en que vaya a terminar. Seguramente no será sólo en gritar y volver a casa como advertía hace unos días en New York el irreverente Slavoj Zyzek, para algunos el filosofo maldito de la época.

La fecha no se puede dejar pasar. Algo pudiera estar empezando. Por lo menos reconforta saber que tener sueños no significa estar dormidos. Que a pesar del chip no ha muerto la utopía. Que se recupera la esperanza en que otro mundo es posible.

La solución está a la mano

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