Tiburoneando

La izquierda mexicana en sus diferentes vertientes, después de una larga experiencia de luchas y de confrontación con la realidad durante prácticamente todo el siglo XX, comprendió que el objetivo de alcanzar el socialismo en México, en esta etapa histórica, y la posibilidad de hacerlo por la vía revolucionaria, esto es mediante la violencia armada, se había convertido en una meta sin posibilidades de conclusión práctica, esto es, en una utopía. Fue entonces que procedió a abrazar el camino electoral, conquistar tribunas y espacios políticos en el marco del capitalismo, para poder influir ampliamente en la vida pública, en la vida social y tratar de desarrollar su agenda para avanzar en sus objetivos y causas. La formulación mejor lograda para sintetizar a estas últimas ha sido con una frase-objetivo que las engloba: conquistar para México el Estado social, democrático y de derecho. Un Estado social, democrático y de derecho es perfectamente posible y viable en el marco de la sociedad

En Quintana Roo el ejercicio de la política a partir de grupos familiares es un hecho frecuente y notorio. Tal vez más que en otras entidades. Proviene de los orígenes mismos de la constitución del estado y, por tanto, es una práctica asentada y reproducida en toda la época del PRI… y más allá.  El presidente AMLO hizo referencia al nepotismo manifiesto en la elección del Comité Ejecutivo Estatal de Morena. Tres parejas sentimentales de presidentes municipales y la hermana de un diputado federal fueron la causa. Si se observa con más detalle, se encontrará que en todo el Consejo Estatal hay otros vínculos de familias políticamente reconocidas. Eventualmente podrán verse en diferentes niveles de los gobiernos. Lacras de la política del viejo régimen les llamó. Actos que pueden ser legales pero que son inmorales. Respuesta a botepronto. Como suele suceder en casos comprometidos que tienen que ver con su entorno o partido, personalmente se desmarca, pero no pasa a mayores. Recordemos,

Los hechos violentos que se desencadenaron recientemente en varias regiones del país -Guanajuato, Jalisco, Chihuahua, Baja California- mismos que causaron pánico local, espanto nacional y atrajeron la atención internacional, han dado origen a una polémica ácida no solamente en torno a la identificación de sus causas sino también sobre sus posibles consecuencias.  Los hechos suceden en un momento en el cual el rumbo, el futuro y las funciones de los cuerpos de seguridad nacional están siendo controvertidas en el marco institucional y legal. Los acontecimientos son públicos y documentados: se desató la violencia intencionalmente provocada, coordinada y ostensible, con el fin de hacerla evidente a la vista de todos. Las interpretaciones y los intentos de explicar los hecho son muy variados y contradictorios: FATALISTAS Por un lado extremo, están quienes observan que “todo el país” está incendiado. Que es el fracaso evidente de la estrategia oficial de seguridad de los “Abrazos No Balazo

México independiente ha transitado por cuatro transformaciones significativas en un lapso de 200 años. Es una periodización histórica que se impuso en la segunda mitad del siglo XX para dar legitimidad al régimen consolidado después de la Revolución.  Ahora, el gobierno encabezado por AMLO se ha propuesto desencadenar una nueva transformación relevante, que habrá de ser la quinta, aunque con un recuento inconcluso del pasado se refiere, reitera y simboliza que es la cuarta, la 4T . La razón es explicable: tal es el aborrecimiento y rechazo a la etapa neoliberal recién sucedida que, en una retórica contradictoria, se le desaparece de la memoria histórica oficial a la vez que reaparece y permanece, repetida una y otra vez en el discurso, porque es el odiado enemigo a vencer; el culpable de todos los males por superar. Se le invoca para exorcizarlo, pero históricamente no cuenta. Sin embargo… si el neoliberalismo es lo que se está superando, es porque ha existido como un hecho trascenden

Apenas hace unos días me preguntaba sobre el rumbo que habrá de tomar el país a raíz de la formación de un cuadrángulo de acontecimientos que alteran los términos iniciales de la transformación: Agotamiento de los recursos públicos disponibles para los proyectos y programas emblema que orillaron a decretar la "pobreza franciscana" desde el gobierno federal. Inflación internacional creciente que amenaza a llegar al 10% en el país. Controversia internacional riesgosa con los socios comerciales más importantes en el marco del T-MEC. Desastroso muestra de debilidad institucional en Morena al realizar sus "asambleas electivas", lo cual agrega complicaciones para la preparación del relevo presidencial. Muy pronto empieza a haber señales de respuesta.  Esta misma semana se anunció la reducción de los llamados "apoyos complementarios" (estímulos fiscales) para el consumo de las gasolinas:  Se elimina totalmente para la Premium . La Magna pasa de 1.23 a 0.6

¿Es conveniente y posible rectificar el rumbo económico sin perder el control político? Esa debe ser la pregunta que se hace al día en Palacio.  Mantener el curso económico soberanista como va, asegura altos costos por el endurecimientos de los socios internacionales, acumulables a la inflación y a las arcas nacionales vacías. Parece ser insostenible . La alta demanda presupuestal de los programas sociales, el subsidio al consumo de las gasolinas y la interminable inversión en las inconclusas obras emblemáticas del sexenio pueden ser una bomba de tiempo.  Las finanzas públicas aguantan, hasta ahora, por la recaudación estándar, los ingresos petroleros con precios internacionales altos y por las remesas. Un cambio repentino en alguna de estas variables hará que la ecuación de la estabilidad se desconfigure. El giro económico, en reversa, podría ser silencioso , casi subrepticio, sin renunciar al discurso que sostiene el respaldo popular.  Socios internacionales e inversionistas privados

“Sí hubo fraude, pero nomás tantito”. Frase inaceptable para un país con la competencia electoral tan frágil. Y es que la democracia representativa en México es muy reciente. Está tan poco asentada aún que siempre corre el riesgo de sucumbir ante las tentaciones autoritarias que han sido las predominantes a lo largo de nuestra historia.  En 201 años de vida independiente apenas hemos experimentado escasamente 22 con respeto al voto ciudadano y alternancia de partidos en la presidencia de la república. El resto del tiempo, sin importar tipo de régimen político (conservadores, liberales, revolucionarios o neoliberales) el autoritarismo ha sido el sello del poder.  Nuestra democracia nos ha costado mucho y debemos defenderla. Las nuevas generaciones que solo han vivido en ella deben suponer que siempre ha sido así, pero no es el caso. Si les gusta, deben cuidarla. Y si no les gusta del todo, bien vendría un esfuerzo por mejorarla, porque el autoritarismo les va a gustar menos. Se los d