Tapar baches con ocurrencias

La golpiza mediática debido a los baches callejeros estaba siendo descomunal. Ya se decía que los hoyos habían desplazado a la seguridad como preocupación social principal. "Bienvenidos a Cancun, la capital del bache" era un cartel muy pesado. Se necesitaba taparlos, urgente, aunque no hubiese asfalto.

Así me explico el repentino surgimiento del comunicado por la “desaparición” de 162 millones de pesos de las arcas municipales de Benito Juárez. Se detonó el cohete en domingo para que sea carne de nota toda la semana y, seguramente, un poco más (si no brinca otro súper tema). Si ese fue el objetivo, la reacción municipal fue tardía. Se esperó a la intervención muy publicitada del Gobierno del Estado. En el imaginario colectivo ya estaba el supuesto de que el Presidente no puede, el Gobernador sí.

Lo peor vino después. Contraviniendo un principio básico en el uso de los distractores, se optó por un tema que atrae la atención y el conflicto hacia adentro del gobierno y de su partido en vez de alejarlos.  Los tres expresidentes involucrados son amarillos, igual que el actual. Todos son presuntos responsables. Los medios más irresponsables ya los hicieron culpables cuando la propia información oficial es muy parcial y no se puede presumir que el dinero haya sido sustraído, robado, mal utilizado o, tal vez, “por ahí está”. Por lo pronto el desprestigio para todos está encima. Se llama escupir para arriba.

Si a alguien le interesa la transparencia y que las cuentas sean claras es al PRD. Para un partido, gobernar bien son amores. La sociedad, sobre todo, merece una satisfacción cuando ya se le dio a conocer que existe la presunción de un grave problema. Para eso, primero debería consumarse bien la investigación y agotarse los procedimientos administrativos hasta tener una conclusión en firme. Después, si proceden, vendrán las medidas legales. Antes de eso es un desatino estar litigándolo en los medios, a medias. Un absurdo. Autogolpe con más beneplácito en la acera de enfrente.

El PRD local se disponía a presumir que, con todo y sus dificultades, había salido ileso de la reciente contienda interna para renovar sus órganos directivos. Se conformará un nuevo Consejo Estatal más representativo de la pluralidad interna. Quince mil participantes es una excelente plataforma para preparar la próxima elección constitucional. Ocasión para pasar a la etapa de los acuerdos. Para el acuerpamiento. Oportunidad, incluso, para renovar compromisos y hacer un mejor gobierno. Cerrar filas.

Se desinflaron los globos. El líder principal le echó aceite hirviendo a la fiesta.


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