Planetario en Cancun



Llegamos tarde, sin duda, al filo derramado de la hora para iniciar. La puerta cerrada. Lo siento, no pueden entrar; el lugar esta lleno. Debe estar empezando, no vamos a molestar si pasamos en silencio. No se puede, hay 190 lugares y están todos ocupados. 

Pensé que nos dirían que una vez cerrado se impide el acceso porque se traba la puerta por dentro o porque al expositor le da migraña cuando lo interrumpen; pero no: era por la falta de asientos. Tenemos boletos comprados con anticipación: con el folio 000025 y 000026; mire. 

No se puede; dos personas han insistido demasiado y se les ha permitido permanecer sentados en la escalera. Pero, ¿y los boletos?. Ya no se puede; regresen mañana; tenemos una plática sobre el pez espada. No estábamos buscando cualquier cosa que hubiera en cartelera; nos interesan los cenotes, es decir, esta. 

Lo siento no pueden entrar y estar parados; ni siquiera hay donde. O sea que hubo más boletos vendido que asientos disponibles. Se dibujó en el aire una mueca que parecía confundida aunque en la confusión creí verle lo socarrona. Acto seguido llegaron dos personas en la misma circunstancia; después una tercera. 

No se puede; no hay lugares. No se pudo. Nos lo perdimos por no poder llegar antes de la hora. Confirmado: el Planetario esta muy bonito... por lo menos por fuera. 

Felicidades sinceras por su primer aniversario.

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