Haciendo la tarea

Como cuando los cisnes bajan del pedestal para embarrarse en el tablado, cumpliendo con el compromiso de los pasos del vals mientras se marean picoabajo espejeados por un lago de mentiritas. 

Como cuando el látigo del amo empezó a ser inferior a las ideas para doblegarse frente a la insinuación de la otra voluntad.

Como cuando el maestro de primaria pudiera ser una cadena de necedades para incrustar en las cabezas una serpiente secuestrada de vanidad. 

Como cuando el águila se va de vacaciones y no hay pollito alguno que quiera lavar los baños al revés.  

Como cuando la tarea no es mas que eso: un descampado de color amarillos tono hiel para poder comer en un plato atascado de pobres posibilidades cocinadas sin espuma.

Como cuando las flores tienen que agradar enfrascadas en un vidrio lejano de cualquiera de las raices del corral.

Como cualquiera de los arrebatos en las articulaciones que se contrapongan a los deseos magestuosos de unos huesos dispuestos a sucumbir.